Mi Aysa

Since we have memory, we have been taught both at home and in school about the care of the most precious resource for humans: water. It can be as simple as ‘when we brush our teeth, we should turn off the tap’ or ‘let’s not take too long in the shower.’ From a young age, we have automated these actions into our daily habits.

Nowadays, we see it as a routine, requiring no effort to perform these actions. It goes beyond thinking about the bills for water consumption; it is ingrained in our subconscious to care about water usage. However, a significant portion of the population is not conscious of water conservation. We didn’t have to go far to find this issue; a great example is the Federal Capital, Buenos Aires. The World Health Organization (WHO) estimates that each individual residing in the capital consumes 612 liters of drinking water per day, while the WHO suggests that an individual only needs 100 liters of water to meet their needs. Why does this happen? A report from the Ciudad Foundation explains that this occurs due to a low level of awareness, citizen participation, and adherence to coexistence norms. Not to mention the fact that the government fails in its role of controlling this matter. There are not many proposed solutions, but today there is the BA 147 application. In this app, citizens of Buenos Aires can report, make complaints, and submit requests about the city. This enables citizens, through the application, to report situations of illicit water consumption, allowing the government to take action

Solution:

As we know, not everywhere teaches these values regarding water conservation or adheres to the regulations governing the responsible use of this resource. We have conceived an idea for a solution. Create an app where each family or individual residing in the federal capital can connect, register their residence, and then be responsible for paying their water consumption bills. If they exceed the 100 liters of water that the World Health Organization estimates as necessary to meet individual needs, these individuals will have to pay an additional fee on top of the water bill. Separately, the app will have an awareness section informing users about all the consequences of daily water wastage and providing basic solutions to reduce it.

Conclusion:

We have conducted an analysis of the water issue in the Federal Capital, its consequences, and the measures being taken in this regard. In the process, we focused on the problem of water wastage due to a lack of household care and concluded that one of the most crucial points to address this issue is education. Since this situation could improve with the simple act of changing some habits, it is essential for society to be informed and able to care for water.

Fossil Fuels: Vehicles in Buenos Aires

Our concern arose from the use of fossil fuels. As Buenos Aires is a city heavily frequented by vehicles, we wondered about the extent of their pollution. Upon investigating, we were struck by how much vehicles contribute to pollution.

We looked into what kind of actions were being taken in the city to mitigate CO2 emissions. We concluded that, despite several planned measures, individual cars were not being considered, nor was the regulation of the greenhouse gases they emit.

Below, I am attaching a document that demonstrates the research we have been conducting.

Combustibles Fósiles by Ignacio Delgener

We propose a prototype that detects CO2 emissions from exhausts and triggers an alarm to alert drivers about excessive fuel burning. This prototype not only monitors and alerts about CO2 emissions but also serves as a visual and auditory reminder, promoting more ecological and responsible driving behaviors. The decision was made to focus on Buenos Aires to facilitate development and increase the possibility of applying the prototype more effectively in a local context.
Further clarification provided in the video below.

Mi Aysa


Desde que tenemos memoria, nos han enseñado tanto en nuestras casas y como en el colegio el cuidado del recurso más preciado por los humanos, el agua. Tan simple como “cuando nos lavamos los dientes hay que cerrar la canilla” o “no tardemos mucho en bañarnos”. Desde pequeños lo hemos automatizado en nuestros hábitos diarios.

Hoy en día lo vemos como una rutina, no requiere de ningún esfuerzo realizar estas acciones. Vá más allá de pensar en las facturas del consumo de AYSA, está en nuestro subconsciente cuidar el consumo. Sin embargo, gran parte de la población no es consciente del cuidado del agua. No tuvimos que alejarnos mucho para encontrar esta problemática, un gran ejemplo es la Capital Federal, Buenos Aires. La OMS se estima que cada individuo que reside en la capital consume 612 litros de agua potable por día, mientras que la OMS  plantea que un individuo solo requiere 100 litros de agua para satisfacer sus necesidades. ¿Por qué ocurre esto? Un informe de FUNDACION CIUDAD nos explica que esto sucede ya que el nivel de concientización, participación de los ciudadanos y respeto a las normas de convivencia es bajísimo. Ni hablar del hecho que el estado no cumple su rol de control sobre este asunto. Muchas propuestas de soluciones no existen, Hoy en dia existe la aplicación BA 147. En ella los ciudadanos de la ciudad de Buenos Aires pueden denunciar, hacer reportes, quejas y solicitudes sobre la ciudad. Esto habilita a los ciudadanos mediante la aplicación puedan comunicar si hay situaciones de consumo de agua ilícito y que el gobierno gestione. 

Solución Propuesta:

Como sabemos que no en todos lados se enseñan estos valores sobre el cuidado del agua o toman responsabilidad a las normas del cuidado sobre este recurso, concebimos una idea de solución. Generar una app en la que cada familia o individuo que resida en la capital federal se conecte, ponga su vivienda y de ahí tenga que pagar las facturas de consumo de agua. Que si gasta más los 100 litros de agua que la OMS estima que se requieren para satisfacer cada uno sus necesidades, este individuo/s tendrán que pagar un cargo extra aparte de la factura de agua. Por separado, la app tendrá un área de concientización informando todas las consecuencias del derroche de agua diario y soluciones básicas que reducirán este.

Conclusión:

Hemos realizado un análisis sobre la problemática del agua en Capital Federal, sus consecuencias y las medidas que están siendo realizadas al respecto. En el proceso, nos fuimos centrando en el tema del derroche del agua por falta de cuidados domésticos y llegamos a la conclusión de que uno de los puntos más importantes para resolver este problema es la educación. Como esta situación podría mejorar con el simple hecho de cambiar algunos hábitos, es fundamental que la sociedad esté informada y pueda cuidar el agua.

Microplásticos

Los microplásticos, amenaza imperceptible

Los microplásticos son plásticos de un tamaño de 3 a 5 nanómetros. Para que tengan en cuenta, 1 nanómetro es una millonésima parte de un milímetro. Estos provienen de la erosión y degradación del plástico y pueden terminar en los mares y hasta en el aire que respiramos. Si lo respiramos, este terminará en nuestros pulmones, y si este termina en el mar probablemente será comido por un pez que luego será consumido por una persona. Además, algunas partículas de microplásticos son tan pequeñas que pueden llegar hasta pasar por los poros de nuestra piel.

Los microplásticos son un problema mundial que cada vez va en aumento con la producción de plástico.


Solución propuesta

Luego de investigar, llegamos a la conclusión que la forma más directa y sencilla para reducir la cantidad de microplásticos es simplemente reducir la cantidad de plásticos. Los plásticos se generan por el hombre, por lo que recae en nuestras manos reducir su cantidad.

La mejor manera de reducir la cantidad de plásticos es a través de un consumo responsable y evitar el uso de plástico, sin embargo esto no siempre es posible por lo que otra opción es reciclar. No obstante, este puede ser un proceso complicado ya que a veces la gente se confunde a qué contenedor pertenece los objetos que quieren tirar. Es por esto que ideamos un tacho inteligente, el cual estará integrado con una inteligencia artificial fuerte entrenada para distinguir entre los distintos tipos de residuos. A través de la IA, el tacho podrá predecir qué tipo de residuo se tiró y enviarlo a su contenedor correspondiente dependdiendo del tipo de desecho que sea.

Además, una vez que los plásticos son llevados a la central de reciclaje no todo el plástico se recicla. Es por eso que a esos plásticos sobrante los llevamos a un establecimiento cercano donde se encuentran compartimientos con gusanos de seda y zophobas morio en su interior.  Estos son gusanos que pueden descomponer el polietileno y el poliestireno, los cuales son dos de los plásticos más usados en la industria.

Sin embargo, existe otro tacho inteligente similar al nuestro llamado bin-e.  No obstante, en nuestro tacho se pueden desechar varios tipos de residuos a la vez.


Conclusión

Realmente pensamos que es necesario disminuir la cantidad de plásticos en el mundo para asegurarnos que los microplásticos nunca lleguen a ser una verdadera problemática. La disminución de plásticos garantizan nuestro futuro y será un gran paso para seguir avanzando en el futuro.

Microplastics

Microplastics, imperceptible threat

Microplastics are plastics whose size ranges from 3 to 5 nanometers. To keep in mind, 1 nanometer is one millionth of a millimeter. These are products of the erosion and degradation of plastic and can end up in the seas and even in the air we breathe. If we breathe it, it will end up in our lungs, and if it ends up in the sea it will most probably end up in a fish that will then be eaten by someone. In addition, some microplastic particles are so small that they can even pass through the pores of our skin.

Microplastics are a global problem that is increasing with the production of plastic.


Proposed solution

After researching, we concluded that the most direct and easiest way to reduce the amount of microplastics is to simply reduce the amount of plastics. Plastics are generated by man, so it falls on our hands to reduce their quantity.

The best way to reduce the amount of plastic is through responsible consumption and avoiding the use of plastic, however this is not always possible, so another option is to recycle. However, this can be a tricky process as people sometimes get confused as to which bin the items they want to throw belong to. This is why we ideated a smart bin, which we integrated with a strong artificial intelligence which was trained to distinguish between different types of waste. Through this, the sensor can predict what type of waste was thrown away.

Also, once the plastics are taken to the recycling center, not all the plastic is recycled. That is why we put those leftover plastics in a in a container, near the recycling plants, with silkworms and zophobas morio. This are worms that can break down polyethylene and polystyrene, which are two of the most widely used plastics in the industry.

It should be clarified that after finishing the project, we found out that it already existed. However, ours is different from the other one in that it only allows one residue at a time while ours allows many. The other smart bin is called bin-e.


Conclusion

We really think that it is necessary to reduce the amount of plastics in the world to make sure that microplastics never become a real problem. The reduction of plastics guarantees our future and will be a great step to continue advancing in the future.